Como muchas sabréis no dejo de buscar fórmulas cosméticas que me ayuden a mejorar mi piel, no sólo en su aspecto externo sino también en "lo que no se ve".
Por ello quería hacer una entrada un poco más extensa acerca del producto cosmético que realmente está científicamente comprobado que es actualmente la molécula con mayor capacidad hidratante y regenerativa, el ácido hialurónico (AH).
Pese a que se le denomina ácido, no es un ácido. Al AH es un polisacárido glucosaminoglucano constituido por cadenas de carbohidratos complejos, disacáridos de N-acetilglucosamina y ácido glucurónico.
Aunque la función de los cosméticos sobre las capas de la piel es compleja, voy a intentar daros una explicación lo más sencilla posible de cómo actúa el AH sobre nuestra piel.
Realmente ningún producto hidratante por mucho que nos quieran "vender" aporta agua. En realidad la hidratación se mide por lo que ese producto evita la pérdida de agua de nuestra piel. El AH juega un papel importante en el mantenimiento del espacio extracelular, facilita el transporte de solutos iónicos y nutrientes y preserva la hidratación cutánea. Los lugares de la epidermis, ricos en AH, pueden atraer agua desde la dermis, mientras que los lípidos extracelulares, originados en los queratinosomas del estrato granuloso, donde ya no está presente el AH, bloquean la difusión del agua a través de la piel formando una barrera que impide la pérdida de agua. Ambos procesos son cruciales para el mantenimiento de la hidratación cutánea.
Es la capacidad de retención de agua que tiene el AH la que hace que sea unos de los productos cosméticos más empleados en cosmética. Una vez que se consigue un alta hidratación es cuando los fibroblastos producen colágeno propio uniéndose este colágeno al AH, confiriendo elasticidad y protección.
El descenso de los niveles de AH durante el envejecimiento implica una contracción de la matriz extracelular y una reducción de su viscosidad, una alteración en el nivel de difusión de iones y macromoléculas desde la sangre a los tejidos y viceversa, interviniendo probablemente en la aparición de sequedad y arrugas. Es por ello que el aporte extra de AH exógeno sea un potente producto antienvejecimiento.
El AH que yo utilizo es Hialucic (que es tiene la mayor concentración disponible en el mercado) y del que ya os hablé como el el milagro para mi piel. Estoy también comenzando a utilizarlo en el cuero cabelludo para favorecer la nutrición del mismo y por consiguiente conseguir una disminución de la caída capilar, así que ya os contaré si noto resultados.
Espero que no os haya resultado muy tediosa la entrada pero quería profundizar un poco más en los beneficios del ácido hialurónico. Y si lo usáis con regularidad me encantaría conocer vuestra experiencia personal.
¡¡Un abrazo!!